La música de este melodrama verista, basado en la obra de Giovanni Verga, está compuesta por Pietro Mascagni, con el libreto a cargo de Giovanni Targioni-Tozzetti y Guido Menasci.

Esta ópera, ambientada en Sicilia en el siglo diecinueve, cuenta la historia entre Turiddu y Lola, quien contrajo matrimonio con el carretero Alfio mientras Turiddu prestaba el servicio militar. A su retorno y a modo de venganza, Turiddu seduce a Santuzza. Movida por los celos, Lola vuelve a iniciar una relación con el joven. Aunque Santuzza sospecha que Turiddu le es infiel, intenta evitar que Alfio se percate del adulterio. La gente del pueblo quiere excomulgar a Santuzza por haber mantenido relaciones prematrimoniales y le veta la entrada a la iglesia. En ese momento llega Turiddu, quien había fingido ir a buscar vino a un pueblo vecino cuando en realidad estaba con Lola; Santuzza se enfrenta a él y le recrimina su traición. Acto seguido, Lola entra en escena, silbando, y se dirige a la iglesia, no sin antes mofarse de Santuzza. Turiddu, ignorando los ruegos de Santuzza y quitándosela de encima despiadadamente, va tras su amante. Santuzza, sola frente a la iglesia, le dice a Alfio que su esposa lo engaña con Turiddu y en cuanto se encuentra cara a cara con él, lo reta a un duelo. Tal y como dicta la costumbre local, los dos hombres se besan y Turiddu aprovecha la ocasión para morderle la oreja a su rival, por lo que el duelo es ahora hasta la muerte.  Antes de salir al encuentro de Alfio, Turiddu le pide a su madre, Lucia, que acoja a Santuzza como a una hija. Las dos mujeres se encuentran frente a la casa de Lucia cuando llega la noticia de que han matado a Turiddu.

Esta ópera cuenta con algunas de las más reconocidas composiciones operísticas, por ejemplo el intermezzo, Gli aranci olezzan, Regina Coeli Laetare y La siciliana que Turiddu le canta a su amante antes de que se levante el telón.